Estaba contento porque había logrado hacer todo a tiempo y subir al coche dos minutos antes de que empezaran las noticias. Eso me permitía escuchar el pronóstico y el estado de las carreteras.            

Empezaron las noticias como siempre: Here is the CBC news with Lorna Jackson y luego un  silencio inesperado.

            Ella recomienza a hablar con la voz tomada. Silencio. De nuevo habla: Good Morning, this is the CBC y no puede seguir. Como si tuviera algo en la garganta. Y quiero creer que es eso, como si se hubiera atragantado con algo y no quiere toser en público. Pide disculpas. Vuelve a empezar. Lee una frase:    The returned government in Haiti y se larga a llorar. Es llanto. Pide disculpas dos veces, no habla. Y luego continua.

            ¿Qué habrá pasado? ¿Se habrá terminado una relación? ¿Se habrá muerto alguien en tu familia? ¿Leíste una noticia muy triste? ¿Estás deprimida?

            No sé; sin embargo el contacto se vuelve tan humano. Tan de repente vos, ahí, hablando. No una radio. No una voz desconocida. No. Una persona, un ser humano.

Copyright David Mibashan.